El autismo es un trastorno del neurodesarrollo que afecta la comunicación, la interacción social y el comportamiento. La incidencia de autismo varía según la región y los datos pueden ser difíciles de obtener debido a la falta de detección y diagnóstico en algunos lugares. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la incidencia de autismo en todo el mundo es de aproximadamente 1 de cada 160 niños. Sin embargo, la incidencia real puede ser mayor debido a la falta de detección y diagnóstico en algunos lugares.
En cuanto a la situación en el Perú, según datos del Ministerio de Salud del Perú, la prevalencia de autismo en el país es de aproximadamente 1 de cada 375 niños, lo que representa aproximadamente el 0,27% de la población infantil del país.
Los niños con autismo presentan dificultad para comunicarse, interactuar socialmente y procesar la información siendo un trastorno que afecta a un número significativo de personas en todo el mundo y se ha convertido en un tema cada vez más importante en nuestra sociedad. A pesar de que se ha avanzado en la comprensión del autismo en las últimas décadas, todavía hay mucho por hacer para mejorar la atención, educación y salud de las personas que viven con este trastorno. Es por ello la importancia de tomar conciencia sobre el autismo y la necesidad de promover una sociedad más inclusiva y amigable para las personas que viven con él.
El autismo puede manifestarse de diferentes maneras en cada niño. Sin embargo, hay algunos indicadores de alarma que los padres pueden observar para identificar posibles signos de autismo en niños:
- Ausencia o retraso en el desarrollo del habla y el lenguaje.
- Dificultades para establecer contacto visual y para interactuar socialmente con los demás.
- Comportamientos repetitivos, como balancearse, dar vueltas, mover las manos de manera repetitiva, etc.
- Sensibilidad extrema a ciertos estímulos sensoriales, como la luz, el sonido o el tacto.
- Dificultades para adaptarse a cambios en la rutina o en el entorno.
- Poca o ninguna capacidad para jugar de forma imaginativa o simbólica.
- Problemas para comprender y seguir instrucciones.
Es esencial tomar conciencia del autismo. La falta de conocimiento y comprensión del autismo puede llevar a la estigmatización y la discriminación, lo que hace que las personas con autismo se sientan marginadas y aisladas. Por lo tanto, es importante que la sociedad en su conjunto comprenda que el autismo es un trastorno del neurodesarrollo que afecta la forma en que las personas interactúan con el mundo que las rodea y no una enfermedad que deba ser tratada con desprecio o rechazo. Fomentar la concientización del autismo ayuda a aumentar la empatía y la comprensión hacia las personas con autismo, lo que puede mejorar su calidad de vida.
Es necesario mejorar la atención y el tratamiento del autismo. Las personas con autismo pueden enfrentar una variedad de desafíos, como dificultades de comunicación, problemas de comportamiento y problemas de salud mental, que requieren atención especializada y personalizada. Por lo tanto, es importante que la atención y el tratamiento del autismo se basen en las necesidades individuales de cada persona. Los tratamientos deben ser multidisciplinarios y deben involucrar a un equipo de profesionales de la salud que incluya psicólogos, terapeutas del habla, terapeutas ocupacionales, pediatras y psiquiatras, entre otros.
Finalmente, la salud mental y física de las personas con autismo debe ser una prioridad. Las personas con autismo pueden ser más propensas a sufrir problemas de salud mental y física, como ansiedad, depresión y obesidad. Por lo tanto, es importante que se aborde su salud de manera integral y se les brinde atención médica y de salud mental adecuada. La toma de conciencia sobre el autismo es esencial para promover una sociedad más inclusiva y amigable para las personas que viven con este trastorno.
Raquel Calderón Coronado
Especialista en Audición y Lenguaje, Autismo y Asperger
CPPP 0901918098
